Este proyecto nace de la pasión por los detalles y de la exclusividad. Dos tonos diferentes de azul resaltan las figuras de los protagonistas, los novios, con un toque de brillo especial que refleja la esencia y estilo de la pareja. Cada invitación de boda es una pieza única, diseñada y elaborada a mano con materiales de alta calidad.
Más que una invitación, es un recuerdo especial que marca el inicio de una historia única. Además, diseñé unas etiquetas especiales para los regalos, añadiendo un guiño muy personal que hará aún más especial el momento.